Descubre los órganos afectados por la venlafaxina: ¡Importante información que debes conocer!

Descubre los órganos afectados por la venlafaxina: ¡Importante información que debes conocer!

Venlafaxina, cuándo y cómo tomarla

Composición de Venlafaxina Retard Stada

  • La venlafaxina puede retrasar el crecimiento y el aumento de peso en los niños.
  • En resumen, la venlafaxina es un medicamento efectivo para el tratamiento de diversos trastornos psiquiátricos, pero su uso debe ser cuidadosamente supervisado por profesionales de la salud debido a sus posibles efectos secundarios y interacciones medicamentosas.
  • Hable con el médico de su hijo sobre los riesgos de administrarle venlafaxina.
  • El aumento de las dosis de venlafaxina debe realizarse de acuerdo a la evaluación del médico.

Toxicidad por serotonina y el síndrome de discontinuación[editar]

La venlafaxina es un medicamento perteneciente a la clase de los antidepresivos, conocido comúnmente por su nombre comercial Effexor. Se utiliza principalmente para tratar trastornos del estado de ánimo como la depresión y la ansiedad. Sin embargo, como cualquier medicamento, la venlafaxina puede tener efectos secundarios en diferentes órganos y sistemas del cuerpo.

Qué es Venlafaxina Retard Stada y para qué se utiliza

Venlafaxina: Antidepresivos

Uno de los órganos más afectados por la venlafaxina es el sistema nervioso central, ya que actúa sobre los neurotransmisores del cerebro para regular el estado de ánimo. Esto puede provocar efectos secundarios como mareos, somnolencia, insomnio, cambios en la libido y problemas de memoria. En el sistema cardiovascular, la venlafaxina puede aumentar la presión arterial y la frecuencia cardíaca, por lo que es importante tener precaución en pacientes con problemas cardíacos.

Formas disponibles[editar]

Además, la venlafaxina puede tener efectos sobre el sistema digestivo, causando náuseas, diarrea, estreñimiento y pérdida de apetito. En el sistema endocrino, se ha reportado que la venlafaxina puede provocar cambios en los niveles de azúcar en la sangre, lo que puede ser un problema para pacientes con diabetes. En general, es importante tener en cuenta estos posibles efectos secundarios y consultar con un médico si se experimentan molestias al tomar venlafaxina.

No todos los bebés expuestos a la venlafaxina tendrán estos síntomas. Informe a sus proveedores de atención de salud si está tomando venlafaxina en el momento del parto. Si es necesario, los bebés pueden ser monitoreados para detectar síntomas. Venlafaxina produce algunas veces efectos no deseados de los que puede que no sea consciente, tales como aumentos de la tensión arterial o un latido cardiaco anómalo; cambios ligeros en los niveles sanguíneos de enzimas hepáticas, sodio o colesterol. Con menos frecuencia, venlafaxina puede reducir la función de las plaquetas de la sangre, lo que conduce a un aumento del riesgo de aparición de cardenales o hemorragia. Por tanto, su médico puede requerir realizar análisis de sangre ocasionalmente, en particular si ha estado tomando venlafaxina durante mucho tiempo. Venlafaxina no debe usarse para niños y adolescentes menores de 18 años.

Efectos de la venlafaxina en el sistema nervioso central

La venlafaxina es un medicamento utilizado para tratar la depresión, ansiedad y trastornos de pánico, entre otros. Actúa en el sistema nervioso central, específicamente en los neurotransmisores serotonina y noradrenalina. El aumento de estos neurotransmisores puede ayudar a regular el estado de ánimo y disminuir los síntomas de estos trastornos.

Impacto en el corazón y el sistema cardiovascular

  • FarmacodinamiaLa venlafaxina es 3 a 5 veces más potente para inhibir la recaptación de serotonina que la de noradrenalina.
  • Además, un porcentaje de pacientes pueden experimentar aumento de la presión arterial, taquicardia y cambios en el peso corporal.
  • Las investigaciones indican que la venlafaxina inhibe la recaptación de serotonina en dosis bajas (menos de 100 mg/día), mientras que la recaptación de noradrenalina aumenta en el rango de dosis de 100 a 375 mg/día.
  • Si su bebé tiene estos síntomas cuando nazca y está preocupada, póngase en contacto con su médico y/o matrona, quienes podrán aconsejarle.
  • También pueden presentarse malestar estomacal, pérdida de apetito, cambios en el peso, dolor de cabeza y dificultades sexuales.
  • Su administración combinada con alcohol o diazepam no resulta en un efecto aditivo sobre el desempeño psicomotor.

Aunque la venlafaxina principalmente afecta al sistema nervioso central, también puede tener efectos en el corazón y el sistema cardiovascular.  Venlafaxina y clonazepam  han demostrado que la venlafaxina puede aumentar la presión arterial en ciertos pacientes, por lo que es importante que se vigile de cerca la presión arterial durante el tratamiento.

Posibles efectos en el sistema digestivo

La venlafaxina puede causar efectos secundarios en el sistema digestivo, como náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento. Estos síntomas suelen ser leves y temporales, pero si persisten o empeoran es importante consultar con un médico.

Influencia en el hígado y los riñones

El uso prolongado de venlafaxina puede afectar la función hepática y renal en algunos pacientes. Es importante realizar análisis de sangre periódicos para monitorear la función de estos órganos durante el tratamiento con venlafaxina.

Efectos en la piel y el sistema inmunológico

Algunas personas pueden experimentar reacciones cutáneas como erupciones, picazón o enrojecimiento de la piel al tomar venlafaxina. Estos efectos secundarios suelen ser raros, pero si se presentan es importante informar al médico para evaluar la necesidad de ajustar la dosis o cambiar la medicación.

Consideraciones importantes antes de iniciar el tratamiento

Antes de comenzar a tomar venlafaxina, es importante informar al médico sobre cualquier condición médica preexistente, especialmente enfermedades del corazón, del hígado o de los riñones. También es importante informar sobre cualquier otro medicamento que se esté tomando, ya que la venlafaxina puede interactuar con otros fármacos y provocar efectos secundarios. Es fundamental seguir las indicaciones del médico y comunicar cualquier síntoma o efecto adverso que se presente durante el tratamiento.